La mala psicología


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Traigo a debate el siguiente texto extraído de la sección de Ciencia, dedicado a las pseudociencias, del famoso portal Hipertextual, con el estoy plenamente de acuerdo. No obstante, esto no significa que algunas de las terapias psicológicas que se citan puedan resultar eficaces en determinadas ocasiones y personas. Me gustaría conocer vuestra opinión.

Una de las áreas en las que más peligro existe de precipitarnos en la pseudociencia sin que nos percatemos de ello es la psicología, debido sobre todo a la necesidad que tenemos de autoconocimiento. A continuación tenéis los ejemplos más representativos.

  • Psicoanálisis: Sigmund Freud, padre de la disciplina en el convulso siglo XIX, no elaboró sus teorías usando una metodología científica, sino su intuición. Por ello, es imposible comprobar la certeza de las hipótesis psicoanalíticas ni contrastar la eficacia de los tratamientos experimentalmente: Karl Popper dijo que son infalsables. Y por su parte, Carl Jung, el conocido discípulo de Freud, usaba la astrología para determinar la personalidad. Además, se ha descubierto que la tasa de remisión espontánea de un problema mental coincide con la de la supuesta eficacia de las terapias psicoanalíticas; y lo que ahora sabemos es que, por ejemplo, la influencia de la personalidad de una madre no tiene relación alguna con la homosexualidad de sus hijos, como defiende el psicoanálisis, que, pese a que disfrutó de mucha predicación durante décadas e incluso hoy en Argentina y en Francia aún goza de ella, los estudios actuales de psicología lo han relegado sencillamente a la historia por su innegable importancia cultural.
  • Grafología y grafopsicología: la primera propone que es posible conocer la personalidad de alguien analizando los rasgos de su escritura; la segunda, que la reeducación gráfica puede servir como terapia y cambiar la conducta de cualquiera. Pero, no solo estas afirmaciones no han sido demostradas, sino que incluso los estudios más recientes han expuesto su falibilidad a pesar de que, como la astrología, se asientan sobre el efecto Forer o Barnum: uno se siente identificado por descripciones generales o vagas aplicables a mucha gente. Eso sí, no confundáis la grafología, demasiado presente en los departamentos de recursos humanos, con la labor de los peritos calígrafos, que únicamente se dedican a precisar si alguien es el autor de un escrito.
  • Parapsicología: el amplio campo en el que se integra todo lo atribuible a la percepción extrasensorial y la manipulación física realizada con la mente de vivos o muertos, centrado en el estudio de fenómenos inexplicables y en cuyas conclusiones, habiendo sido bien examinadas, se ha encontrado falta de rigor experimental y sesgos de fe. La telepatía, la psicoquinesis, los viajes astrales, el espiritismo y otros fenómenos sin verificación forman parte de la parapsicología.
  • Dianética: se trata de una terapia para la curación de enfermedades mentales inventada por Ronald Hubbard, el fundador de la secta de la Cienciología, y que consiste en el relato reiterado e hipnótico de las supuestas percepciones de cuando uno ha estado inconsciente o ha sufrido dolor físico, llegando a un momento en que se terminan de descargar estos considerados registros de la memoria y se da por acabado el tratamiento. Sus fundamentos, además de las propias ideas de Hubbard, son la reencarnación y la telepatía, y no están acreditados.
  • Psicología transpersonal: es el misticismo oriental como terapia psicológica; toma aspectos espirituales del budismo, del hinduismo, del legado psicoanalítico de Jung e incluso de la parapsicología, y consigue una mezcla de religión, ocultismo y filosofía que es muy difícil de aceptar científicamente. “El despertar de la conciencia” es su mantra.
  • Autoayuda y coaching: la sistematización del pensamiento positivo y de la fuerza de voluntad como infalibilidad y garantía de éxito y, por lo tanto, de la responsabilidad propia y completa de todos los males que a uno le sobrevienen, sin considerar la organización y el contexto en que nos desenvolvemos con sus desigualdades, la influencia de los otros y los sucesos inesperados, que mezcla la concepción protestante del fracaso con cierta benevolencia e ideas New Age. Los libros de autoayuda (de Coelho, Chopra, Riso, Dyer, Canfield, Byrne, etcétera) y los entrenadores y animadores (coaches) establecidos en el mundo empresarial predican estas ideas y proponen métodos y terapias apoyados en ellas. Su simplicidad y sus contradicciones con la psicología compleja y acreditada inhabilitan la autoayuda así formulada y el coaching como una forma científica y verdaderamente útil de usar la mente en nuestro provecho. No obstante, se están empezando a desarrollar modelos de coaching psicológico que, si logran desprenderse del pensamiento positivo tal como lo emplean los que sus iniciadores llaman “pseudocoaches”, quizá consigan pasar los estándares científicos. Se trata algo todavía incipiente, en cualquier caso; y sólo la ciencia humilde nos dirá a dónde puede llegar.

Fuente original: La mala psicología 

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3 respuestas a La mala psicología

  1. Pingback: Los tratamientos “milagro” | MI FOBIA SOCIAL

  2. Muy bueno el articulo. Es importante que la gente este al tanto de los tratamientos psicológicos basados en la evidencia y los que no lo son. Por supuesto después cada uno elije donde busca ayuda. Pero, no es lo mismo optar por que te tiren las cartas( aun quienes creen en eso saben que no es considerado una ciencia) que hacer un tratamiento psicológico, que se supone esta basado en conocimientos establecidos, y que resulte que en realidad son tratamientos pseudocientíficos. Yo soy psicóloga en argentina y acá el psicoanálisis es sumamente popular. La gente habla del inconsciente como si fuera algo tan cierto como la ley de gravedad.

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  3. Soy psicóloga de carrera, entiendo el grafico que expones. También he estudiado coaching psicologico, ambas en la universidad. Sin embargo, no me gusta el termino mala psicología, más bien hablaría de psicología no científica o psicología alternativa, algo así como sucede con la medicina y la medicina alternativa. Mi pregunta es ¿qué te funciona? No todos los que van a un psicólogo resuelven su problemática, a veces el insight o darse cuenta les llega de otro modo. ¿por qué no sumar en vez de excluir? Yo misma utilizo (además de) la PNL en formación y en coaching y también hay quienes dudan de su efectividad.

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